El sistema creado por los investigadores es para medir la granulometría del acero y para ello se requiere de un microscopio, computadora y un programa especializado.
El sector automotriz y de autopartes en México ha jugado un papel importante en el desarrollo económico de diversas regiones del país. Sin embargo, a raíz de la crisis económica global del año pasado el sector reportó un lento crecimiento, y en consecuencia el desarrollo tecnológico también se vio disminuido.
No obstante, investigadores de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) consideran que otro de los obstáculos para el desarrollo adecuado de la industria automotriz y de autopartes en términos locales es que la tecnología nacional para satisfacer las demandas del sector son reducidas y dependen en gran medida de ingeniería extranjera de altos costos, sobre todo para las pequeñas y medianas empresas.
Preocupados por esa situación y tras identificar una carencia en la industria de autopartes, los expertos de la UAQ se dieron a la tarea de desarrollar un software que facilita el análisis microestructuras de materiales por medio de visión artificial, y busca substituir los sistemas extranjeros de alto costo.
De acuerdo con el doctor Aurelio Domínguez González, quien coordina el proyecto junto con el doctor Iván Terol Villalobos, al identificar que en la industria empleaban para sus análisis software alemanes y estadunidenses con un costo entre 80 y cien mil dólares. “Esos sistemas operan con base en una tecnología de visión artificial que nosotros venimos desarrollando desde hace varios años a través de una línea de investigación de la UAQ, y gracias a ello nos dimos cuenta que podíamos producir un producto similar aquí y disminuir hasta en 50 por ciento los costos que actualmente significan para el sector, además de desarrollar mejoras en técnicas de caracterización de materiales”.
El sistema desarrollado por los investigadores de la UAQ es utilizado para medir la granulometría del acero, y para ello se requiere de un microscopio, una computadora y un software especializado que permita cuantificar las características geométricas de los granos, orientaciones, incrustaciones e impurezas a nivel microscópico de los aceros de manera automática y a partir de estos valores buscar la forma de mejorar el proceso de producción del material que incremente la vida de las piezas mecánicas.
Domínguez González detalló que a parte de los costos, al emplear diferentes programas extranjeros, las mediciones obtenidas varían mucho dependiendo del equipo con el que se realicen las pruebas, y esa incertidumbre puede significar decisiones equivocadas en los procesos de producción de los materiales.
“Por ello desarrollamos nuestra propia tecnología adecuada a las necesidades de la industria nacional. El sistema consta de un microscopio, una cámara y la computadora con su respectivo software; empero, si alguna industria ya cuenta con el equipo (hardware) podemos adaptar el software a sus instrumentos y ello abarataría aún más sus costos”.
El microscopio con una amplificación mínima de 150x trabaja con una cámara que captura la imagen del material expuesto, después el software, que además de operar los aparatos analiza el material de manera automática, analiza la textura del material y evita así los errores de apreciación que anteriormente se cometían cuando las imágenes eran comparadas por el ojo humano contra las cartas patrón.
Sumado a ello, Domínguez González señaló que otra de las ventajas del trabajo que han venido desarrollando es que ahora se cuenta con el conocimiento para desarrollar una tecnología que actualmente se encuentra en etapa de validación y que en un futuro podría ser trasladada a otros campos de aplicación, entre ellos el médico, químico, biológico y de materiales avanzados donde se requiera el análisis de imágenes por medio de visión artificial.
México, D.F.
El sector automotriz y de autopartes en México ha jugado un papel importante en el desarrollo económico de diversas regiones del país. Sin embargo, a raíz de la crisis económica global del año pasado el sector reportó un lento crecimiento, y en consecuencia el desarrollo tecnológico también se vio disminuido.
No obstante, investigadores de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) consideran que otro de los obstáculos para el desarrollo adecuado de la industria automotriz y de autopartes en términos locales es que la tecnología nacional para satisfacer las demandas del sector son reducidas y dependen en gran medida de ingeniería extranjera de altos costos, sobre todo para las pequeñas y medianas empresas.
Preocupados por esa situación y tras identificar una carencia en la industria de autopartes, los expertos de la UAQ se dieron a la tarea de desarrollar un software que facilita el análisis microestructuras de materiales por medio de visión artificial, y busca substituir los sistemas extranjeros de alto costo.
De acuerdo con el doctor Aurelio Domínguez González, quien coordina el proyecto junto con el doctor Iván Terol Villalobos, al identificar que en la industria empleaban para sus análisis software alemanes y estadunidenses con un costo entre 80 y cien mil dólares. “Esos sistemas operan con base en una tecnología de visión artificial que nosotros venimos desarrollando desde hace varios años a través de una línea de investigación de la UAQ, y gracias a ello nos dimos cuenta que podíamos producir un producto similar aquí y disminuir hasta en 50 por ciento los costos que actualmente significan para el sector, además de desarrollar mejoras en técnicas de caracterización de materiales”.
El sistema desarrollado por los investigadores de la UAQ es utilizado para medir la granulometría del acero, y para ello se requiere de un microscopio, una computadora y un software especializado que permita cuantificar las características geométricas de los granos, orientaciones, incrustaciones e impurezas a nivel microscópico de los aceros de manera automática y a partir de estos valores buscar la forma de mejorar el proceso de producción del material que incremente la vida de las piezas mecánicas.
Domínguez González detalló que a parte de los costos, al emplear diferentes programas extranjeros, las mediciones obtenidas varían mucho dependiendo del equipo con el que se realicen las pruebas, y esa incertidumbre puede significar decisiones equivocadas en los procesos de producción de los materiales.
“Por ello desarrollamos nuestra propia tecnología adecuada a las necesidades de la industria nacional. El sistema consta de un microscopio, una cámara y la computadora con su respectivo software; empero, si alguna industria ya cuenta con el equipo (hardware) podemos adaptar el software a sus instrumentos y ello abarataría aún más sus costos”.
El microscopio con una amplificación mínima de 150x trabaja con una cámara que captura la imagen del material expuesto, después el software, que además de operar los aparatos analiza el material de manera automática, analiza la textura del material y evita así los errores de apreciación que anteriormente se cometían cuando las imágenes eran comparadas por el ojo humano contra las cartas patrón.
Sumado a ello, Domínguez González señaló que otra de las ventajas del trabajo que han venido desarrollando es que ahora se cuenta con el conocimiento para desarrollar una tecnología que actualmente se encuentra en etapa de validación y que en un futuro podría ser trasladada a otros campos de aplicación, entre ellos el médico, químico, biológico y de materiales avanzados donde se requiera el análisis de imágenes por medio de visión artificial.
México, D.F.
No hay comentarios:
Publicar un comentario