Las especies migratorias se ven afectadas, debido a que los indicadores del clima cambian y la especie confunde los periodos cuándo deben partir, dice la doctora Rosalía Pastor Nieto del zoológico de Chapultepec.
Hasta hace algunos años, los proyectos involucrados en la conservación de la fauna, en particular los relacionados con las especies en peligro de extinción, sólo se enfocaban en investigar la destrucción del hábitat, la contaminación o el factor humano en competencia por los recursos naturales. Sin embargo, ahora resulta necesario tomar en cuenta el cambio climático como uno de los factores primordiales de afectación.
“Diversos organismos internacionales enfocados a la conservación de la biodiversidad reconocen la necesidad de revisar las listas de los animales en peligro de extinción y tomar en cuenta el cambio climático, pues este ya afecta a ciertos grupos taxonómicos de vertebrados e invertebrados”, comentó la doctora Rosalía Pastor Nieto, directora técnica y de investigación de la dirección general de zoológicos y vida silvestre del zoológico de Chapultepec.
Particularmente se pueden ver afectados los invertebrados polinizadores y vertebrados pequeños que intervienen en la reproducción de las flores, así como las aves migratorias, todos ellos con funciones específicas en sus ecosistemas.
“Al haber cambio climático, las especies migratorias se ven afectadas, porque los indicadores del clima cambian y la especie confunde los periodos cuándo deben partir”, explicó la especialista mexicana.
Otros animales que han resultado afectados son los anfibios, que necesitan su hábitat húmedo, porque si se tornan calurosos o extremos respecto a la temperatura normal, su reproducción se ve perjudicada, así como su estilo de vida. “Los estudios realizados a nivel global --añadió la especialista-- ya consideran a ambas especies (anfibios y aves) en la lista roja; es decir, que han sido afectados por el cambio climático”.
En un caso particular, añadió Pastor Nieto, están los murciélagos que son muy importantes para polinizar ciertas especies de flora, de modo que su desaparición representaría un impacto sensible. Incluso, la industria del agave se vería afectada, ya que para poder producir tequila es necesaria la participación de los murciélagos, pues son parte de la reproducción del agave azul.
Los murciélagos también son importantes para los productores de maíz, pues cuando estos animales llegan en grandes cantidades a las cosechas de dicho grano se comen los insectos que pudieran convertirse en plaga para el producto.
Respecto a los anfibios, la doctora dijo que esta especie necesita contar con una calidad del agua y suficiente humedad, si ocurriera un cambio en la precipitación pluvial en ciertas áreas o regiones geográficas, se modificarían las estructuras poblacionales de los batracios.
Al respecto, la especialista del Zoológico de Chapultepec apuntó que resulta necesario realizar estudios, de manera particular para la región del Valle de México, porque es un hecho que ya hay cambios en la precipitación pluvial del país, y si antes era estable, hoy hay más huracanes que tormentas tropicales y se modifica el hábitat natural de especies animales.
“En áreas como la ciudad de México tenemos lluvias torrenciales durante periodos cortos que producen inundaciones, también la temperatura se ha elevado a nivel global, como consecuencia vemos la reproducción de mosquitos en diversas épocas del año, provocando enfermedades en la población que antes no existían”, puntualizó.
Para la especialista, el cambio climático es un fenómeno de gran escala ante el que se precisa tomar acciones locales y globales con el fin de intentar equilibrar el hábitat de la fauna nacional y mundial.
México, D.F.
Hasta hace algunos años, los proyectos involucrados en la conservación de la fauna, en particular los relacionados con las especies en peligro de extinción, sólo se enfocaban en investigar la destrucción del hábitat, la contaminación o el factor humano en competencia por los recursos naturales. Sin embargo, ahora resulta necesario tomar en cuenta el cambio climático como uno de los factores primordiales de afectación.
“Diversos organismos internacionales enfocados a la conservación de la biodiversidad reconocen la necesidad de revisar las listas de los animales en peligro de extinción y tomar en cuenta el cambio climático, pues este ya afecta a ciertos grupos taxonómicos de vertebrados e invertebrados”, comentó la doctora Rosalía Pastor Nieto, directora técnica y de investigación de la dirección general de zoológicos y vida silvestre del zoológico de Chapultepec.
Particularmente se pueden ver afectados los invertebrados polinizadores y vertebrados pequeños que intervienen en la reproducción de las flores, así como las aves migratorias, todos ellos con funciones específicas en sus ecosistemas.
“Al haber cambio climático, las especies migratorias se ven afectadas, porque los indicadores del clima cambian y la especie confunde los periodos cuándo deben partir”, explicó la especialista mexicana.
Otros animales que han resultado afectados son los anfibios, que necesitan su hábitat húmedo, porque si se tornan calurosos o extremos respecto a la temperatura normal, su reproducción se ve perjudicada, así como su estilo de vida. “Los estudios realizados a nivel global --añadió la especialista-- ya consideran a ambas especies (anfibios y aves) en la lista roja; es decir, que han sido afectados por el cambio climático”.
En un caso particular, añadió Pastor Nieto, están los murciélagos que son muy importantes para polinizar ciertas especies de flora, de modo que su desaparición representaría un impacto sensible. Incluso, la industria del agave se vería afectada, ya que para poder producir tequila es necesaria la participación de los murciélagos, pues son parte de la reproducción del agave azul.
Los murciélagos también son importantes para los productores de maíz, pues cuando estos animales llegan en grandes cantidades a las cosechas de dicho grano se comen los insectos que pudieran convertirse en plaga para el producto.
Respecto a los anfibios, la doctora dijo que esta especie necesita contar con una calidad del agua y suficiente humedad, si ocurriera un cambio en la precipitación pluvial en ciertas áreas o regiones geográficas, se modificarían las estructuras poblacionales de los batracios.
Al respecto, la especialista del Zoológico de Chapultepec apuntó que resulta necesario realizar estudios, de manera particular para la región del Valle de México, porque es un hecho que ya hay cambios en la precipitación pluvial del país, y si antes era estable, hoy hay más huracanes que tormentas tropicales y se modifica el hábitat natural de especies animales.
“En áreas como la ciudad de México tenemos lluvias torrenciales durante periodos cortos que producen inundaciones, también la temperatura se ha elevado a nivel global, como consecuencia vemos la reproducción de mosquitos en diversas épocas del año, provocando enfermedades en la población que antes no existían”, puntualizó.
Para la especialista, el cambio climático es un fenómeno de gran escala ante el que se precisa tomar acciones locales y globales con el fin de intentar equilibrar el hábitat de la fauna nacional y mundial.
México, D.F.
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